Desiderátum

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Por Michelle Gotay Morales

 

En general las nueve décimas partes de nuestra felicidad se fundan en la salud.

– Arthur Schopenhauer

 

La salud es el primer requisito después de la moralidad.

– Thomas Jefferson

 

En la salud hay libertad. La salud es la primera de todas las libertades.

– Henri-Frederic Amiel

La salud es el fundamento en el cual reposan los pueblos.

– Ramón Emeterio Betances y Alacán

 

La salud holística es la mayor de las bondades en cualquier persona o país. La salud corpórea depende de factores genéticos y ambientales. En el desarrollo humano y espiritual la sanidad sentipensante depende de factores tanto internos como externos. Primero, se requiere reconocer que nuestra corporalidad es un ente formado por masa y energía, así lo confirmó el gran científico judío-estadounidense, Albert Einstein. Significa que cualquier materia se puede tornar en energía y cualquier pensamiento por insulso que parezca puede materializarse.

A estos componentes intrahumanos caben mencionarse los sociológicos y humanistas, política, economía, historia, cultura, música, arte, literatura, lenguaje y religión. Además, están las nuevas tecnologías y las comunicaciones de siempre. Para el gran pensador materialista y ateo, Karl Marx lo que hace a la vida ser vida y estar en la vida es el conflicto social, la lucha de la clase trabajadora ante quienes ostentan el poder.

La economía crea la ruta que provee la posibilidad de una vida digna, una vida con plenitud para cada persona. Creo necesaria junto a la formación política, la formación salubrista que forme la coraza individual para la lucha colectiva del movimiento estudiantil. Una educación con sentido social y para el progreso sustentable. La UPR es Puerto Rico.

Observamos el diseño de un plan social con ordenamiento legal que rige económicamente la vida toda de un país pero con énfasis en ciertos elementos universitarios y divergentes por su resistencia y combatividad al plan repetitivo y sin ordenamiento real, impuesto por el estado local y federal.

Existen innumerables factores que pueden ser la última gota para desbordar la copa de la desesperanza. Existen $450 millones de razones para sólo ver oscuridad en medio del campus universitario, o en cualquier otro escenario. Existen unas leyes vitales, no viables que exigen que el tren de la educación pública de envergadura internacional se obstruya, su sistema se descuartice y solo queden algunas unidades. Existen otros factores legales provocados por estudiantes y donantes políticos, quienes han impuesto el encarecimiento de la Huelga día tras día. Ahora falta la promesa o la realización desde el gobernador.

La gobernanza de la polis se rige con economía y derecho, señoras y señores. La ética se fundamenta en la razón y la misericordia pero nunca, nunca su deseo se fundamenta en la irracionalidad del poder y la codicia avara, ni en la pisotada del más fuerte y organizado. El medio ambiente no nos somete. Somos nosotros y nosotras quienes le damos forma y peso.

Han ocurrido dos suicidios de jóvenes huelguistas del Recinto de Río Piedras en éstos últimos meses de hecatombe y vorágine. Puede que esas “dos bajas”, como me confesara el afectado compa católico en la vía principal cerca de la Biblioteca Lázaro y el Museo, simbolizen la propuesta muerte pedagógica y vocativa de todo el estudiantado universitario de la UPR y sus respectivas estructuras con sus distintivos emblemas animalescos.

En cualquier suicidio la razón ha sido doblegada por las emociones negativas según nuestro pensador más completo y orgánico, Eugenio María de Hostos y Bonilla. Allí el pensamiento cree que la valía del sujeto nada vale. Su visión está afectada y confunde la verdad por el error. No logra ver luz en medio de la tormenta. No puede observar una escalera ante el inmenso muro. No alcanza vislumbrar razón y corazón en la calculada guerra económica y política. No logra confiar en sus facultades y sensibilidades. Tampoco logra tener temperanza. Menos proyectarse al futuro. Solo existe el presente. Y ahí solo hay deseo de muerte. Soledad. Silencio. Inmovilidad.

A nombre de la comunidad universitaria en Río Piedras nuestro más sentido pésame a las familias de esos dos jóvenes y la familia extendida, el estudiantado, la docencia, la no docencia y toda aquella persona que sienta cercana esas vidas únicas fugaces. La UPR-RP está de luto por partida doble, y duele a mares. Les deseamos fortaleza y sosiego a sus madres y padres.

El suicidio, la muerte no es solo asunto de mujeres. Ni debe verse como algo enteramente emotivo. Atender el suicidio es una tarea de mujeres y hombres que creen y apuestan por la vida, la juventud, el pasado, el presente y el futuro de la Universidad.

Jóvenes, sus ausencias son un vacío inmenso en medio de la lucha y la amistad. Toda vida es valiosa y sagrada. Con ella se ofrecen los dones individuales al entorno. Una pizca de arena glocal, local y global para el bien de todos y todas.

Si el todo no es superior a las partes, significa que ese todo no logra homogeneizar los componentes que lo conforman. Éstas son las individualidades. Pero visto desde el organigrama del gobierno institucional, son sus 11 Recintos. Y las defendemos desde el movimiento estudiantil con nuestra mente y cuerpa. Juventud combativa y emprendedora, seamos el arrojo, la valentía con análisis, teoría y metodología para contagiar de Revolución al país que está completamente enfermo y desanimado.

Si se quitan algunas Unidades, mantengámonos en pie de lucha. El Recinto de Río Piedras lleva la batuta, tiene el balón en sus manos. Pensemos. ¿Puede haber en realidad un Diálogo honesto, transparente y verdadero entre dos formas distintas de entender la vida?

Cuando el valor de la educación es alterado con el mercado, la desobediencia es ley. Sí, a la Revolución de consciencia y praxis. La victoria es nuestra.

Michelle Gotay Morales es teóloga luterana con estudios en psicología, y realiza estudios doctorales en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.

A l@s compas huelguistas


Por Michelle Gotay Morales

 

En general las nueve décimas partes de nuestra felicidad se fundan en la salud.

– Arthur Schopenhauer

 

En la salud hay libertad. La salud es la primera de todas las libertades.

– Henri-Frederic Amiel

 

La salud es el primer requisito después de la moralidad.

– Thomas Jefferson

 

La salud es el fundamento en el cual reposan los pueblos.

– Ramón Emeterio Betances y Alacán

 

Solo la muerte de uno de ustedes levanta una alarma social y pedagógica. Imagínensen dos. Han acontecido dos suicidios de jóvenes huelguistas de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (UPRRP) durante el año en curso. Mi más sentido pésame a las familias de esos jóvenes, sus allegados, amistades, profesorado y familia extendida. La UPRRP está de luto por partida doble, y duele a mares.

 

Me gradué en psicología hace algún tiempo atrás, mientras realizaba mi bachillerato de este hermoso y comprometido Recinto. Luego proseguí estudios religiosos o teológicos a nivel de maestría. Y aunque no fuese psicóloga -sin licencia- ni religiosa, respeto y valoro la vida toda. Cada vida es valiosa e imprescindible para el disfrute de ustedes mism@s y para la lucha colectiva, que les trasciende como sujetos individuales.

 

Siempre he creído que sin salud no es posible la más mínima lucha o compromiso político. La salud personal es el fundamento de las más nobles, progresistas y vanguardistas sociedades. Y aunque nuestro País esté profundamente enfermo de avaricia, codicia y poder, nosotros y nosotras que construimos una ciudad universitaria más democrática y participativa, somos quienes más salud debemos tener u obtener.

 

Debemos procurar una mayor desintoxicación de todo aquello que nos drena, de todo lo que nos hace daño y buscar cada vez más todo lo que nos da paz, salud, fuerza, creatividad, bienestar y amplitud. Cada joven, mujer u hombre, tiene unas fortalezas y unas necesidades particulares, y solo ustedes saben lo que más les gusta y añoran. Les exhorto a bucear en su interior y conectarse con esa luz y fuerza que habita dentro de sí y más extensivo, el colectivo, con quienes luchan tanto dentro como fuera de los portones de la Universidad.

 

La lucha por la UPR es bella y requiere sacrificios personales, pero nunca, nunca de su salud y su estabilidad psicológica y emocional.

 

Si alguien de ustedes necesita salir de los portones para buscar paz, háganlo sin remordimientos y sin culpa alguna. La LUCHA por la Universidad CONTINUARÁ FIRME. Pero usted tiene todo el derecho a vivir en sosiego y salud holística para el bien suyo, de su familia, de sus compas y del campus al que pertenece. Yo no acampo en el Recinto de Río Piedras, pero sí he entrado para acompañarles y luchar junto a ustedes desde el interior. Hasta ajedrez he jugado. Mi humilde experiencia ha sido que caminando por el campus, sentí un cambio temporal y espacial. Una mejor y mayor conexión mía con la naturaleza, con lo urbano, con ustedes, con la Universidad, con Dios. Una mística que respira lucha estudiantil, una mística de resistencia y ofensiva al mal gubernamental y federal. Una mística política.

 

Cuando ustedes sientan más silencio y soledad del exterior, es cuando más movimiento hay por ustedes y por la lucha. La UPR es Puerto Rico, y créanme se está moviendo cielo, mar y tierra. Jamás han estado ni estarán en soledad. Hay un mini-universo con ustedes adentro y afuera, luchando por nuestro País en conjunto.

 

Michelle Gotay Morales es teóloga luterana con estudios en psicología, y realiza estudios doctorales en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.